Galletas de Mantequilla (Tipo Danesas)
490g de harina
¼ tsp sal
1 tsp (4g) de “baking powder” o levadura Royal.
227g mantequilla sin sal a temperatura ambiente
300g azúcar
2 huevos
tsp: cucharilla (tea spoon)
Tamiza la harina y mézclala con la sal y la levadura.
En otro bol (apto para las varillas, preferiblemente las eléctricas), batir la mantequilla con el azúcar hasta que esté esponjosa (de 3 a 4 minutos). Añade los huevos y bátelo bien hasta que esté bien mezclado. Ve incorporando la mezcla de la harina y bátelo bien hasta que tengas una masa suave. Ha medida que vayas incorporando la harina la masa se vuelve más dura, en función de la fuerza de tus varillas es posible que tengas que terminar el amasado a mano.
Divide la masa en dos mitades y envuélvelas en film transparente. Déjalas reposar en la nevera como mínimo una hora, mejor si es más rato.
Precalienta el horno a unos 180ºC.
Para extender la masa, hay varias maneras. Una de las más sencillas es extenderla entre dos hojas de papel de horno. Para ello, saca una de las bolas de masa de la nevera (mantén la otra fría) y ponla en el centro de una hoja de papel de horno, cúbrela con otra hoja y extiende la masa con el rodillo. El grosor al que debes dejar la masa va en función de cómo te gusten las galletas (más gruesas o finas) y de las formas que quieras darles, Yo las dejé de unos 3-4mm de grosor (suben un poquito en al hornearlas, pero poco). Ve cortando la masa con los moldes que tengas (puedes mover un poco el molde en el momento en que cortas la galleta para separar la masa de sus vecinos). Una vez las tengas cortadas, usando una espátula metálica, ve recogiéndolas y depositándolas en la bandeja del horno cubierta con papel de horno (mejor que enharinada). Deja al menos 3mm de separación entre galletas o se pegarán entre ellas.
Los bordes que te sobran los vuelves a amasar, haces otra bola, la extiendes... y lo repites tantas veces como te haga falta hasta terminar con toda la masa (puedes alternar con la que tienes en la nevera para que la que estás usando se enfríe un poco). Salen un buen montón de galletas así que a menos que las hagas muy gruesas, tendrás que hacer varias hornadas. Te aconsejo que guardes las que están “a la espera” en la nevera para que mantengan mejor la forma.
Si no les vas a poner cobertura (forrarlas con chocolate o glasearlas), puedes espolvorear un poco de azúcar glass sobre las galletas antes de hornearlas.
Hornea las galletas hasta que empiecen a tomar un tono marrón clarito, especialmente por los bordes. El tiempo dependerá del grosor de la galleta, pero si son de aprox. 4mm, serán unos 10 minutos.
Cuando las saques del horno ponlas a enfriar sobre una rejilla para que no se te humedezcan.
Estas galletas, en una caja de galletas o un tarro hermético, duran semanas sin estropearse (aunque dudo que te duren tanto!)
No hay comentarios:
Publicar un comentario